I + D: PROYECTO “TDM-SEAL”
SELLOS DINÁMICOS PARA UN ALTO RENDIMIENTO
En las ollas a presión de la cocina, las lavadoras, los refrigeradores, los sistemas de plomería, los grifos, los recipientes de oxígeno de los hospitales, los relojes … hay muchos más sellos elastoméricos a nuestro alrededor de los que podemos suponer. Siempre que queramos asegurar el cierre de una cámara, un depósito o un circuito para evitar fugas de líquido, gas o presión, ahí están.
Diez socios de toda Europa están participando en un proyecto denominado “TDM – SEAL”, que ha recibido financiación del fondo europeo “FP7 mechanism”.
El proyecto desarrollará un nuevo proceso, integrado en el moldeado, para la superficie de juntas elastoméricas: “Texturizado durante el moldeado”.
Con este objetivo, varias pymes europeas, como Barbieri Rubber Srl y diversos centros tecnológicos, se han unido en el proyecto europeo TDM-SEALS.
¿Os recuerdais el desastre del Challenger? Es la falla más famosa de una junta tórica.
La junta tórica instalada en uno de los cohetes no resistió debido al repetido exceso de compresión durante su montaje.
Las bajas temperaturas de la mañana del lanzamiento atacaron las propiedades mecánicas del sello, que ya no podía sellar correctamente, produciendo una salida de gases calientes presurizados … y el transbordador espacial estalló en pedazos.
La importancia del sellado generalmente se subestima en comparación con el sistema en el que está instalado, comenta el Ing. Alberto Barbieri, director técnico de Barbieri Rubber Srl.
Este proyecto se centra en sellos dinámicos, donde existe un movimiento relativo entre el sello y las superficies de sellado, como en cilindros neumáticos e hidráulicos, puertas automáticas, maquinaria de construcción, cilindros de freno o trenes de aterrizaje, explica A. Barbieri.
Los sellos dinámicos están sujetos a fuerzas de fricción más altas y sufren más desgaste que los sellos estáticos. Por este motivo, especialmente en cilindros neumáticos e hidráulicos, se instalan juntas de alto rendimiento, para brindar alta resistencia al rozamiento y máxima durabilidad.
¿Cómo reducir la fricción? Se ha demostrado que la fricción entre dos materiales se puede reducir texturizando una de las superficies. Esta técnica, añade A. Barbieri, consiste en practicar micro “hoyuelos” en la superficie. Esta microestructura es capaz de reducir drásticamente el coeficiente de fricción sin comprometer las propiedades de sellado.
El problema es que estos tratamientos deben ser aplicados a través de un post-proceso generalmente un procesado láser, dificultando así un posible desarrollo en la producción a escala industrial. El proyecto TDM-SEALS tiene como objetivo desarrollar un proceso de producción de juntas de baja fricción, integrando el texturizado de la superficie en el proceso de moldeo, para lograr una reducción de la fricción superior al 20%.
Barbieri Rubber aporta al proyecto sus 50 años de experiencia en el moldeado de artículos de caucho, probando los nuevos tratamientos, texturizados y moldes, mejorando el proceso de vez en cuando, hasta la realización final de la junta.
